Este estudio analizó el impacto del sesgo racial en modelos de inteligencia artificial (IA) en las decisiones de contratación humana mediante un experimento con 528 participantes. Para 16 ocupaciones de alto y bajo estatus, el experimento implicó evaluar a los solicitantes junto con modelos de IA que mostraban sesgo racial. Los resultados mostraron que cuando la IA favorecía una raza en particular, las personas también tendían a favorecer a los candidatos de esa raza hasta en un 90% de los casos. Incluso si las recomendaciones de la IA se percibían como de baja calidad o poco importantes, descubrimos que las personas aún podían verse influenciadas por el sesgo de la IA en ciertas situaciones. La preadministración de la Prueba de Asociación Implícita (IAT) aumentó la probabilidad de seleccionar solicitantes que no se ajustaban a estereotipos atípicos de raza-estatus en un 13%.